• Padres de familia lamentaron que, en zonas como la ciudad de México, 487 estudiantes no pudieran ingresar a las aulas por un tema de discriminación

“No hay que impedir el ingreso de estudiantes a las aulas porque porten cabello pintado con tintes llamativos o cuenten con el cabello largo; es mejor que en escuelas, más que la apariencia, se cuide la higiene”, refirió la Federación Nacional de Asociaciones de Padres de Familia A. C., al destacar que, para muchos padres conservadores, el impedir que sus hijos lleguen así a clases, es un tema que se enseña y se educa en casa.

Aurora González Tejeda, presidenta nacional de la FENAPAF, destacó que los presentes son nuevos tiempos y sin duda se debe trabajar en un esquema de inclusión y aceptación a las preferencias de vestuario y apariencia de todos los escolares.

“Sería comprensible si a un aprendiente se le llama la atención por llegar sucio a clases, pero no es adecuado comenzar los desalojos de estudiantes de las aulas, ya que en si subsiste un rezago educativo a consecuencia de la emergencia sanitaria y no es positivo para nadie, que por cuestiones de gusto se pida a los alumnos que regresen a sus casas”, refirió.

Declaró que ciertamente durante el encierro, muchos escolares optaron por dejarse crecer el cabello o pintárselo, aprovechando que en sus casas no existía algún tipo de censura, pero insistió que en la actualidad lo fundamental es rescatar los tiempos perdidos en conocimientos y dejar a un lado cualquier tipo de discriminación que en nada abona.

Cabe aclarar que hasta ahora se han registrado 487 casos en estudiantes de secundaria, preparatoria y universidad, que no han sido admitidos en las aulas por su apariencia, según reporta el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).

Los casos fueron reportados del 3 de enero al 15 de agosto y se siguen analizando otros más que se acumulan, por lo que Aurora González insistió que este tema debe dejarse a un lado, y fortalecer el aprendizaje de los escolares.